A diferencia de las alternativas fósiles, los nuevos combustibles solares producen cero emisiones netas de carbono, son completamente renovables y no requieren tierras de cultivo
Un fotorreactor con una hoja artificial que funciona bajo radiación solar. El mundo trata de lograr la transición a energías limpias, especialmente sustituyendo fuentes de energía contaminantes como las derivadas de combustibles…
Un fotorreactor con una hoja artificial que funciona bajo irradiación solar Daniel Casillas El mundo trata de lograr la transición a energías limpias, especialmente sustituyendo fuentes de energía contaminantes como las derivadas de combustibles fósiles.
Para hacer frente al problema, investigadores de la Universidad de Cambridge (Reino Unido) desarrollaron una tecnología alimentada por energía solar que convierte el dióxido de carbono y el agua en combustibles líquidos que pueden añadirse directamente al motor de un automóvil.
A diferencia de los combustibles fósiles, estos combustibles solares producen cero emisiones netas de carbono y son completamente renovables, y a diferencia de la mayoría del bioetanol, no desvían ninguna tierra agrícola de la producción de alimentos.